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Lacón adobado para muchos

Adobamos un lacón y lo cocinamos en el horno muy bajito hasta que queda tierno y dorado. Porque una deliciosa comida para chiquicientos con 10 minutos de esfuerzo es posible, y nos merecemos celebrar sin sufrir.

Lo más difícil de la receta es llegar hasta casa abrazando a la patorra.
Lo más difícil de la receta es llegar hasta casa abrazando a la patorra.MÒNICA ESCUDERO

Cocinar para mucha gente y divertirse haciéndolo no es un don que tenga demasiada gente, incluso a los cocineros más avezados –nuestro khal Mikel, sin ir más lejos, lo ha confesado alguna vez– les puede dar entre rabia pereza y pavor enfrentarse a una comida para más de seis comensales. Pues bien: esta receta viene al rescate de esa especie de artistas de los fogones: los del terror a las multitudes y la imposibilidad de pergeñar un menú multitudinario sin convertirse en hombre lobo.

Con este lacón en poco menos de 15 minutos de preparación más unas cuantas horas de horno –durante las que tú te puedes dedicar al punto de cruz, el sexo desbocado o intentar adivinar la edad de Jordi Hurtado, porque no tienes que hacer nada– conseguirás la base de una sabrosa comida para entre 8 y 14 comensales, dependiendo del tamaño. Lo más difícil será, si te has olvidado de coger el carro de la compra, llegar hasta casa abrazando a la patorra en cuestión como si llevaras un bebé jamonesco, frío y embolsado en brazos (esto lo sé porque me lo ha contado una amiga, no porque sea una despistada).

Una cosa que descubrí preparando por segunda vez este lacón –la primera fue para celebrar una Cofradía del Santo Bocata– es que no en todas partes se estila vender el lacón con la piel (que, entre otras cosas, lo protege de quedarse securrio). Yo lo he solucionado cubriendo el bichín con papel de plata, básicamente porque lo estuve asando mientras dormía (y justo antes de comerlo le di media hora más a 120 grados y 10 minutos a 200 para que se dorara un poco). Quedó estupendo, pero si lo preparáis en vigilia y también sin piel, podéis darle la vuelta cada dos horas y mojarlo con el jugo de la cocción.

Las especias se pueden tunear al gusto: orégano, salvia, albahaca, pimentón picante e incluso curry en polvo o pasta, jengibre o ras el hanout si queréis mandarlo a pasear por el mundo. Teniendo en cuenta que el horno normalmente tiene dos bandejas, podéis usar la segunda para poner cebollas, zanahorias, patatas, chirivías, alcachofas o lo que os ofrezca la temporada y tener la comida entera lista en un solo movimiento.

Los tiempos de cocción pueden variar mucho dependiendo del peso de la pierna y la temperatura del horno: si queréis ir sobre seguro, haced el lacón lentamente para que la carne quede jugosa y usad un termómetro de sonda: cuando el centro llegue a 73-75 grados, la pieza está lista.

Dificultad: La de encontrar un lacón.

Ingredientes

Para 8-14 personas (según tamaño y hambre)

  • Un lacón fresco (suelen pesar entre 4 y 5,5 kg, el de la foto pesaba 5,4)
  • 1 cucharada de tomillo fresco o seco
  • 1 cucharada de romero fresco o seco
  • Pimienta negra al gusto
  • 10 dientes de ajo
  • 350 ml de vino blanco o caldo de carne
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cucharada de pimentón rojo (dulce o picante)
  • Sal gruesa al gusto

Instrucciones

1.
Mezclar todos los ingredientes (menos el lacón y 150 ml de vino o caldo), ponerlos en un robot de cocina o batidora y procesar hasta conseguir un adobo no muy espeso.
2.
Si nuestro lacón tiene piel, hacerle cortes en forma de rombo para que el adobo penetre mejor. Darle un buen masaje a la pierna con el adobo, taparla con film de cocina y dejarla reposar un mínimo de 4 horas, idealmente de un día para otro.
3.
Poner el lacón a temperatura ambiente –dos o tres horas fuera de la nevera serán suficientes– en el horno a 150 grados con el resto del vino en la bandeja. Pasadas dos horas, bajarlo a 100 y dejarlo unas 8 horas más.
4.
Sacar el lacón del horno, volcar el jugo que habrá en la bandeja en un cazo y reducirlo o hacer una salsa gravy con él.
5.
Devolver el lacón al horno bien caliente, dándole un golpe de calor final de unos 20 minutos a 200 grados para que se dore.
6.
Dejar reposar 15 minutos, cortar y servir con la salsa y el acompañamiento deseado.

¿Has intentado hacer esta receta u otras de El Comidista, y no te han salido bien? Quéjate a la Defensora del Cocinero enviando un mail a defensoracomidista@gmail.com

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