
Una leche de coco olvidada
Y un gazpacho espeso que al final no lo era, un lector con dudas existenciales sobre esta sección y una tarta que cumple años regular: tampoco en febrero hay respiro para la Defensora del Cocinero.
Y un gazpacho espeso que al final no lo era, un lector con dudas existenciales sobre esta sección y una tarta que cumple años regular: tampoco en febrero hay respiro para la Defensora del Cocinero.
Sopas problemáticas, caponatas supuestamente avinagradas, verduras que desaparecen y señoras que se enfadan sin leer bien las recetas: estas son las cuitas de la Defensa del Cocinero en su primera entrega del año.
Y unas berenjenas rellenas supuestamese sosas -que no lo eran-, bombones peleados consigo mismos y una cebolla que aún no ha aprendido a asarse sola: estas son las cuitas de octubre de nuestra Defensora del Cocinero.
Un riada de tahina para llenar tres piscinas olímpicas, una crema de hinojo con más sal que el mar Muerto y un debate lingüístico a cuenta de una paella: nuestra Defensora del Cocinero no se libra ni en verano.
El líder comidista cocinando sin redecilla, una pasta con más tomates que la huerta de Almería y unas magdalenas poco esponjosas: nuestra Defensora del Cocinero ha trabajado más que Fernando Simón en el mes de junio.
Falta de afecto en una sopa verdulera, baile de cifras en unas galletas y olor a pescado en un pan: nuestra Defensora del Cocinero se ha enfrentado a todo tipo de infortunios en el mes de mayo.
Y la mala costumbre de intentar que el tofu sepa a algo, una sopa de alcachofas amarga y unos ingredientes que generan frustración: poca broma con las cuitas de nuestra Defensora del Cocinero durante el mes de abril.
Y unas cebolletas bastante equivocadas, unas empanadas poco concretas y un jugo de rosbif torrefacto: este mes nuestra Defensora del Cocinero no lo ha tenido precisamente fácil.
Y unas increibles albóndigas menguantes, una minestrone incompleta y un rebozado de libre interpretación son algunas de las cuitas a las que se enfrenta nuestra Defensora del Cocinero este mes de febrero.
Los dramas a los que se enfrenta este mes nuestra Defensora del Cocinero van desde una puntualización sobre la sopa de cebolla hasta unos bocaditos difíciles de manipular: una cuesta de enero en toda regla.
La Defensora del Cocinero atiende reclamaciones por la cocción interminable de un rabo, unos malfatti que requieren escurrido extremo y una crema de berenjenas que no se aclara con su propio Pantone.
Dificultades verduleras, un salmorejo muy panarra, una lectora indignada por el origen de la yuca y unos canelones innecesarios son las cuitas a las que se enfrenta hoy la Defensora del Cocinero de El Comidista.
Y unos calamares que no se dejan rebozar, lectores indignados por las versiones no canónicas del hummus y un tofu huidizo son algunas de las cuitas a las que se enfrenta este mes la Defensora del cocinero.
Y un escabeche securrio, unos huevos duros con mucho misterio y un refresco de sandía que necesita ser desactivado: la última entrega de nuestra Defensora antes de las vacaciones ha sido una ardua batalla.
La dificultad de los huevos al colchón hace que un lector se pase al equipo de las croquetas. Las cookies de chocolate y las tortitas de calabacín tampoco cuentan con un club de fans.
"No te lo perdonaré jamás, Comidista. Jamás". Éste es el sentir de una lectora que protesta ante la Defensora del Cocinero por la receta de una tarta. Otros tampoco están felices con platos de alcachofas o bacalao.
Y una porchetta en riesgo de incendio, una sequía de zanahorias o un strogonoff vegetariano poco vegetariano: un mes más, la paciencia de nuestra Defensora no conoce límites.
Y una costra de bacalao libremente interpretada, las vicisitudes de mantener un hojaldre crujiente y una tarta de queso con resultados desiguales: así se las gasta este mes la Defensora del Cocinero.
Y una tempura demasiado líquida, un ramen bastante inexacto y una masa de tarta en la que puedes dejarte la dentadura: los problemas de nuestros cocineros este mes de febrero tienen su intríngulis.
Y una receta de bizcocho que no lo es, un hojaldre duplicado y demasiadas recetas de rosbif: enero no está siendo un mes fácil para nuestra querida Defensora del Cocinero.
Y un sashimi de chicharro por libre interpretación, un falso tartar con pérdidas y el concepto "especiar al gusto": estas son las cuitas a las que se enfrenta nuestra Defensora del Cocinero este mes.
Y un pesto que ha conocido días mejores, un ingrediente desconocido y una receta italiana pasada por agua: vuelve la Defensora del Cocinero, a tope de cuitas tras el merecido descanso veraniego.
Y una petición sobre el número de comensales en las recetas, una carbonara 'poco' cuajada y dudas con el tipo de harina: nuestra Defensora se mete en ídem para resolver un mes más vuestras cuitas.
Y una lectora que trata de colárnosla, unos bagels arrugados y más dudas con las proporciones: nuestra defensora responde a vuestras quejas tras la vuelta de las vacaciones.
La Defensora del Cocinero de El Comidista se enfrenta a protestas con el puerro, dudas sobre tortitas y peticiones de información sobre calorías. Y también le confunden con Samantha de MasterChef.
Y unos cofrades de la Santa Hermandad del Auténtico Calçot Casero, una masa de pestiños que no hay por dónde cogerla y un pollo coreano esnob: las protestas de mayo a nuestra Defensora del Cocinero tienen miga.
Y unas galletas reformuladas estilo libre, una receta de bollos de canela muy específica y la enésima consulta sobre los macarrones con chorizo: la primavera altera la consulta de nuestra Defensora del cocinero.
Y unos garbanzos chicletosos, un horno que funciona a pedales o unos moldes de pastelería que generan desacuerdos generacionales: las cuitas de la Defensora este mes de marzo son cosa fina.
Y la enésima cuita con los macarrones con chorizo, unas estrellas de chocolate algo liosas y una falsa carbonara con un lío de huevos: febrero no está siendo fácil para nuestra querida Defensora.