Si vas a Calatayud, pregunta por la Dolores, y si vas a Palma, por el Mercado del Olivar. Este dicho me lo acabo de inventar, pero encierra una gran verdad: cualquier garbeo por Mallorca subirá muchos enteros si incluye una visita a este enclave de su capital, especialmente a su zona de pescaderías.
Como otros grandes mercados de pescado de las islas mediterráneas -véase el de Catania, en Sicilia-, el del Olivar es un festival de bichos mainstream, como el rape o el atún, pero también indies, como los tiburoncitos o las rayas. Las señoras y señores que los venden lo saben todo sobre la fauna acuática comestible; por eso les pedimos que nos dieran algunos consejos para comprar y cocinar pescado fresco aunque no sepas distinguir una merluza de un boquerón. Si quieres conocerlos y que no te den gato de mar por liebre de océano, no tienes más que mirar el vídeo de arriba.