
Ocho cenas rápidas para celebrar el cambio de temporada
Platos únicos sencillos y sabrosos que combinan los primeros ingredientes de la primavera con los que todavía colean del invierno y fondos de despensa atemporales.
Platos únicos sencillos y sabrosos que combinan los primeros ingredientes de la primavera con los que todavía colean del invierno y fondos de despensa atemporales.
El secreto de este plato está en la salsa, una bomba de umami del chef David Chang que adaptamos en versión suavizada para aliñar un plato fresco de verdura.
Para hacer esta receta en casa solo necesitas cinco ingredientes y pasar 15 minutos en la cocina. Y lo mejor es que con el mínimo esfuerzo económico y físico tienes un plato bien cargado de sabor.
Fresas y tomates raf, habas y alcachofas, espinacas con arándanos y frambuesas o zanahorias y acelgas: en este momento de la temporada coinciden alimentos con los que puedes preparar recetas sencillas y deliciosas.
En las pocas semanas en las que coinciden estos tres ingredientes primaverales podemos preparar platos tan sabrosos, saludables y coloridos como esta ensalada.
Para que esta leguminosa dé lo mejor de si misma es importante aplicarle una cocción corta. Hoy la preparamos con un sofrito de jamón, cebolla y un poco de vino blanco.
Para hacer esta tarta salada vegetariana tienes tres opciones: preparar la masa quebrada en casa a mano, elaborarla con la ayuda de un robot de cocina o, si eres el rey de los vagonetas, comprarla en el súper.
Inspirándonos en la idea de los 'fishcakes' ingleses, unas tortitas a base de pescado y patata, llevamos el bacalao al aperitivo o la guarnición. Porque hay vida más allá de buñuelos y croquetas.
Dos ingredientes de temporada y una base de patata, que cocinamos previamente en el microondas y rematamos en el horno el tiempo justo para que el pescado quede cocido y muy jugoso.
Una masa de harina de garbanzo crujiente por fuera y tierna en el interior en la que podemos usar cualquier verdura de temporada. Más una salsa fresca de yogur y pepino para mojar como si no hubiera un mañana.
El hummus, una receta típica en Oriente Medio, se ha extendido ya por todo el mundo. Si a ti también te encanta, prueba a hacer en casa esta versión con guisantes.
La vaina de esta legumbre, prima hermana del guisante, se come entera y sin desgranar. Su sabor dulzón y textura crujiente hace que los tirabeques queden geniales al vapor o salteados, como en esta receta.
La cocina de Holanda no es la alegría de la huerta, pero tiene algunas recetas tradicionales que valen mucho la pena. Un ejemplo es este puré a base de guisantes secos con hortalizas y carne de cerdo.
Guisantes y alcachofas al vapor y una salsa a medio camino entre el pesto y la gremolata que anima y refresca el conjunto. El huevo es opcional, pero muy recomendable.
Una receta rapidísima que une dos legumbres diferentes, perfectamente complementarias. Un toque de menta fresca, algo de ajo, aceite y vinagre suave y un huevo como colofón redondean la propuesta.
No podemos llamarlos "nuggets" por imperativo legal, pero estos bocaditos de guisantes y menta son crujientes, sabrosos e infinitamente más sanos que la versión industrial de pollo.
La llegada de la versión fresca de esta legumbre es uno de los acontecimientos de la estación. Nada mejor para disfrutarlos que conocer sus variedades, su temporalidad y buenas ideas para cocinarlos.
Unos buenos guisantes congelados serán la base para esta reconfortante crema, cuyo sabor se intensifica gracias al puerro previamente dorado. Un aceite de menta fresca y un poco de queso cremoso rematan la jugada.
Italianos: no miréis, porque el pesto de esta receta no es muy canónico. Pero su sabor es tan veraniego como un buen trozo de sepia a la plancha, así que imaginaos la combinación.
Si ya te has pasado las pantallas del hummus y el guacamole y andas en busca de nuevos horizontes para untar, esta crema de guisantes con yogur, limón y un toque de ajo puede ser la nueva protagonista de tus picoteos.
Un corte de cordero muy humilde que se viene arriba en una combinación dulce, ácida y aromática con guisantes, miel, mostaza y un toque de ralladura de limón.
Cómete la primavera a bocados con esta ensalada verde, diferente y resultona que aprovecha lo mejor de las verduras de temporada y queda de fábula con un poco de queso y una vinagreta.
Además de un recetón para que te hagan la ola en casa cualquier domingo, te llevas de regalo una técnica para preparar arroz seco que nunca falla. Prepárala y versiónala para comidas felices 100% libres de monotonía.
Un puré, un salteado y una salsa completamente diferentes entre ellos que se preparan en unos cinco, 25 y 90 minutos. Si no encuentras el que más le conviene a tu carne, es que estás completamente desnortado.
La temporada en la que coinciden los guisantes y los trigueros es tan efímera como satisfactoria, así que cualquier excusa para juntarlos en un plato es buena (más si los Portobello se apuntan a la fiesta).
Si destestas los guisantes, quizá sea porque los has comido recocidos y arrugados. Dale una oportunidad a esta legumbre con una receta fresca, rápida y sencilla.
La primavera, la cocina altera: ahí va una nueva entrega de esta sección en la que damos un repaso a los alimentos que toca comer en cada estación, con consejos para escogerlos bien e ideas para cocinarlos.