
Quenelles de langostinos gratinadas
Preparamos esta especie de buñuelos de tradición francesa en su versión más ligera, rellenos de langostinos con un baño de nata, el aroma de sus cáscaras y un chorro de vermut.
Preparamos esta especie de buñuelos de tradición francesa en su versión más ligera, rellenos de langostinos con un baño de nata, el aroma de sus cáscaras y un chorro de vermut.
No hay ley que impida llevar un plato de un país a otro. Por eso hoy preparamos el arroz más famoso de Italia con un caldo tom yum y otros ingredientes típicos de la cocina thai.
Para que este plato quede genial solo necesitas marisco cocinado al punto, una vinagreta suave con sus jugos para potenciar el sabor, algo de cebolleta, cebollino y clara de huevo picados.
El marisco se viene arriba con el toque cítrico del pomelo, y el conjunto se acaba de alegrar con un aliño de inspiración asiática en el que retozan la salsa de pescado, chile, jengibre y ajo.
Un rebozado crujiente envolviendo langostinos, que podrían ser ostras, gambas, pollo o pescado, una salsa sabrosa y un montón de hortalizas para refrescar, todo dentro de un bollo de pan blanco estilo baguette.
Una preparación que admite casi cualquier tipo de pescado o marisco con patatas guisadas, regadas por un caldo espeso y sabroso y rematadas con una picada de ajo y frutos secos: un lujo marinero sin dejarse el sueldo.
No viene de América sino de Francia, originalmente se hacía con bogavante o langosta y acabó cayendo en el pozo del olvido de la comida viejuna. Pero sigue siendo un platazo, y por eso lo recuperamos.
Cocidos con mayonesa están buenos, pero por una Navidad que innoves tampoco se va a hundir el mundo. Estas recetas con pocos ingredientes y sencillos pasos sacan a este clásico de la monotonía.
¿Clasicismo o vanguardia? ¿Cocción larga o corta? Contamos las dos maneras de hacer langostinos, se las damos a probar al pueblo soberano para que opine, y de propina explicamos tres salsas.
Los restos de langostinos, salmón ahumado y micuit de foie son habituales en estos días de festines familiares y buen zampar. Si ya no sabes qué hacer con ellos, te proponemos tres bocatas para darles otra vida.
Un entrante para tus comidas navideñas que no empapuza, a base de langostinos con una salsa aromática de aire tailandés. Se prepara en cuestión de minutos y tiene un coste más que razonable.
Un caldo tradicional de la cocina mexicana cuya única dificultad radica en encontrar camarones secos (pero puedes sustituirlos por frescos). Pruébala y apunta, que la Navidad está a la vuelta de la esquina.
Un salteado sencillo con fideos de arroz acompañados de verduras, carne, marisco y unas cuantas salsas. Lo puedes adaptar a tu gusto y, más importante aún, al contenido de tu nevera.
Las gambas y los langostinos son también para el verano, pero si quieres chuperretear como es debido necesitas una buena salsa untuosa. Nosotros te damos tres para que lo goces durante la canícula.
En esta plato de pasta usamos el coral escondido en la cabeza de los langostinos para dar sabor a un 'aglio e olio'. Un toque de limón para refrescar, algo de tomate seco y ya tenemos la comida lista.
No todo es arroz en la región del arroz por antonomasia. En la 'terreta' hay toda una serie de platos tan típicos como desconocidos para el resto de foráneos. Los descubrimos con expertos autóctonos.
Éste es uno de esos platos para comer con cuchara y no dejar ni una gota de la mezcla que lo riega. Los langostinos cocidos al punto pueden dejar paso a mejillones, navajas, pulpo y hasta berberechos de lata.
El clásico por excelencia de la comida viejuna vuelve a casa por Navidad. Pero lo hace rejuvenecido y dignificado por la receta del chef Dani García, sin langostinos acartonados ni lechuga iceberg.
Exóticos, ligeros, picantes, clásicos, con queso fundido, ultra rápidos o elaborados con conservas: te proponemos 10 recetas imbatibles para que innoves poniendo tu comida entre dos panes.
Nos vamos a dar una vuelta por México sin movernos de la mesa, gracias al cilantro, la lima, la cebolla y los jalapeños que acompañan a los langostinos, en un receta que aún sabe a un verano que se despide.
Con esta sencilla técnica de cocción conseguiremos un arroz suelto, al punto y con todo el sabor del caldo. El rape y los langostinos son sustituibles en función de lo que ofrezcan la pescadería y la temporada.
Encurtidos caseros exprés, langostinos bien aprovechados y una falsa salsa rosa –más fresca y ligera que la original– acompañan a las patatas que forman la base de esta ensalada con aires del Este.
Los langostinos congelados vuelven a casa por Navidad: acéptalo y aprende a cocerlos de forma que no se conviertan en corchopán. Y como bonus track, tres salsas fáciles para acompañarlos.