Cerdo agridulce casero

La salsa agridulce le va que ni pintada al solomillo. La versión 'háztelo tú mismo' de este plato oriental está tirada y sabe mejor que la de El Buda Feliz o La Muralla China.

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Jamás volverás a pedirlo al telechino. /

Si eres de los que compra la salsa agridulce de bote, probablemente te sorprendas de lo fácil que es hacerla en casa. Y si la pruebas, te quedarás con el culo torcido de lo buena que está y empezarás a mirar con recelo las versiones naranja o rosa fosforescente que te endosa el telechino en el que pides los rollitos primavera.

Para obrar el milagro sólo necesitas vino dulce y vinagre. Si encima le añades cebolleta y almendras crudas picadas, el plato te quedará más chino que Confucio. ¿Quieres más ventajas? Pues que se hace en un pispás, que no incluye ingredientes rarunos difíciles de encontrar, y que el nivel de destreza culinaria que necesitas es más o menos la de Bertín Osborne.

Dificultad

No es un trabajo de chinos.

Ingredientes

  • 1 solomillo de cerdo de capa blanca
  • 250ml de vino dulce
  • 70ml de vinagre
  • 2 cebolletas
  • 1 cucharada de almendra cruda
  • 1 cucharadita de sésamo tostado
  • 80g de arroz blanco

Preparación

  1. Mezclar una medida de vino dulce y un tercio de vinagre y dejar reducir a fuego lento hasta la mitad de su volumen.
  2. Dejar enfriar la salsa y tunearla a tu gusto. Puedes refrescarla con la parte verde de la cebolleta y unas almendras crudas picadas.
  3. Cortar el solomillo en medallones de un dedo de grosor (unos tres por persona) y dorar con aceite de girasol.
  4. Servir el cerdo con la salsa por encima, y acompañarlo con arroz blanco, sésamo tostado cebolleta picada.
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