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Fideuá de marisco

Tiene tanta enjundia como un arroz seco, pero es mucho más fácil de preparar: el único secreto para que esta fideuá salga bien es que el sofrito esté bien seco y el caldo de pescado, muy sabroso.

Comida de domingo
Comida de domingoMÒNICA ESCUDERO

Empiezo con un aviso: no pretendo hacer la fideuá canónica ni la que preparan los maestros fideuàeros en Alicante ni la de tu tío ni la del restaurante ese al que vas los jueves. Es la fideuá de mi madre, que se come algunos domingos en su casa y me trae recuerdos de felicidad y siesta con película de sobremesa de fondo (de esas en las siempre hay un secuestro, un hijo secreto o un intento de matar al cónyugue para irse con otra persona, como si no existiera el divorcio).

En realidad no hay una sola fideuá de mi madre, porque lo que lleva depende de los que ofrezca la temporada y la pescadería: puedes encontrarte gambas, langostinos, galeras o cigalas, y la sepia puede ir mezclada con calamar (o usar solo calamar). También pueden colarse almejas, aunque en ese caso quedará un poco menos seca.

Normalmente el fumet se prepara en casa con pescado de roca, aunque si mi madre tiene el día vago -las madres también tenemos días vagos, eso es irrefutable- puede caer uno de brick de Aneto (que está igual de bueno, aunque sale algo más caro, es lo que tiene la vagancia, que cuesta dinero). Como mi señora madre ya sabe de qué pie cojean los lectores comidistas, se disculpa de antemano por el uso indebido del vino tinto, y dice que si no queréis no se lo pongáis pero a ella le gusta la profundidad de sabor que da.

Dificultad: Es mucho más fácil que un arroz seco, e igual de resultona.

Ingredientes

Para 6 personas

  • 2 sepias medianas
  • Unos 18-24 mejillones
  • 12 gambas
  • 500 g de fideo del número 3
  • El doble del volumen de los fideos de caldo de pescado
  • Dos tomates rojos o de pera
  • 50 ml de vino tinto (opcional)
  • Una cebolla grande o dos pequeñas
  • All i oli para acompañar (si se quiere)

Instrucciones

1.
Lavar los mejillones, abrirlos en una sartén tapada, retirarlos en cuanto se hayan abierto y añadir al fumet el jugo que suelten. Una vez abiertos, quitarles las barbas y descartar la mitad de las conchas. Reservar los mejillones cubiertos con film de cocina para que no se sequen.
2.
Poner en una paellera a fuego medio con un chorro de aceite la cebolla picada bien pequeña con un poco de sal. Cuando esté bien dorada añadir el tomate rallado y seguir haciendo el sofrito hasta que esté oscuro y completamente deshidratado, vigilando y removiendo constantemente para que no se pegue.
3.
Añadir el vino tinto, si se quiere, y dejar que evapore. Añadir un poco más de aceite y dorar las gambas durante un minuto por cada lado. Retirar y añadir la sepia troceada con un poquito más de sal, dándole vueltas unos minutos hasta que esté marcada.
4.
Añadir los fideos -si es necesario, poner un poco más de aceite- y nacararlos hasta que estén dorados (con cuidado de que no se quemen). Poner el caldo, repartir bien por la paella y dejar cocinar unos nueve minutos o hasta que los fideos estén secos. Devolver las gambas y añadir los mejillones a la fideuà. Servir después de tres minutos de reposo, si se quiere, acompañada de all i oli.

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