Ensaladilla de merluza y patatas paja
Con patatas paja de churrería, una buena mahonesa casera y un poco de merluza cocinada al vapor con un toque de fino puedes preparar una ensaladilla brutal en cuestión de minutos.
Con patatas paja de churrería, una buena mahonesa casera y un poco de merluza cocinada al vapor con un toque de fino puedes preparar una ensaladilla brutal en cuestión de minutos.
El país galo no permitirá que se use dióxido de titanio en la elaboración de alimentos, una molécula que sirve para mejorar su aspecto y que está limitada en Estados Unidos, pero no en Europa
Mayonesa para controlar el colesterol, salsa barbacoa que no engorda... El dietista-nutricionista Carlos Ríos nos enseña a sortear las trampas más sofisticadas del supermercado
La presencia de sal, azúcar o conservantes en cantidades más que generosas no siempre significa que tengan vida eterna fuera del refrigerador
¿Te encanta la ensaladilla rusa pero no te vendría mal un poco más de variedad para el aperitivo? Aquí tienes una versión en la que el atún se sustituye por una caballa curada en casa.
Un hostelero de Cádiz ofrece el secreto de sus tres tapas más famosas en la cesión de su establecimiento casi centenario
Patata cremosa, mayonesa casera, una cantidad generosa de variantes para darle vidilla, atún y huevo duro: si te tiemblan las piernas solo de pensar en una ensaladilla con guisantes, la de La Porca es la tuya.
Ninguna supera a la casera, pero a veces no nos queda más remedio que tirar de mayonesa industrial. ¿Con cuál podrías comerte los langostinos esta Navidad? Nuestra experta cata a ciegas ocho marcas y decide.
La llames como la llames, es la salsa suprema, la reina de la cocina y del 'cochinerismo' culinario. Todo sabe mejor con una cucharada de ella encima, pero ¿de dónde viene? ¿Mejor con Y o con H?
Le pedimos a 'ensaladillistas' de toda España que nos cuenten cuáles son los templos a los que peregrinar. Es altamente probable que no esté tu bar favorito, así que relájate y recomiéndalo en los comentarios.
La versión de la ensaladilla que preparan en el restaurante El Sifó es más ligera que la rusa, prima hermana de la escalivada y perfecta para comer tal cual o untar encima de una tostada.
Panceta tierna y crujiente, encurtidos caseros y una salsa con mucha vidilla son los intérpretes principales de este bocadillo inspirado en el bánh mì vietnamita.
Un plato de aprovechamiento que juega con las sobras más habituales cuando asamos un pollo en casa: la pechuga y las patatas. Unos encurtidos y un poco de salsa rematan la jugada en este delicioso y adaptable plato.
La mezcla secreta del Coronel Sanders ya no lo es tanto desde que alguien la encontró apuntada en un cuaderno antiguo. Para que no nos acusen de plagio, la usamos para rebozar bacalao y meterlo en un delicioso bocata.
Y una pannacotta en dos fases, unas galletas misteriosamente securrias, el drama de marinar los boquerones en la nevera y la tortilla pasadita de Jamie Oliver: así le luce la Navidad de la Defensora del Cocinero.
Nos vamos a dar una vuelta por México sin movernos de la mesa, gracias al cilantro, la lima, la cebolla y los jalapeños que acompañan a los langostinos, en un receta que aún sabe a un verano que se despide.
Coger los mejores ingredientes del vermut y convertirlos en un bocadillo viene a ser como componer 'God Save the Queen': la idea que nos hubiera gustado tener a todos pero que, desgraciadamente, se han llevado otros.
Este mes han caído muchos mitos: el desayuno no es tan importante como pensamos, tu congelador no siempre mata al anisakis, el gluten no es malísimo si no eres celíaco, y algunos gazpachos de bote tienen su qué.
Picar, formar y a la sartén: hacer una hamburguesa casera no tiene más complicación, y sí muchas ventajas. Con solo un cuchillo y unos cuantos aderezos asiáticos puedes marcarte una de bonito tan buena como esta.
¿Tienes miedo a la mayonesa casera? ¿Se te corta una y otra vez o vives amedrentado por la pérfida salmonella? No sufras más. La ciencia te ayuda a conseguir la salsa perfecta y a evitar intoxicaciones.
¿Se puede vivir sin ensaladilla rusa? Algunos creemos que no. Aquí tienes unos cuantos consejos para hacerla y comerla a la manera clásica, sin que te den gato por liebre.